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Testimonio Artrodesis Subastragalina

Autor: Pablo Carranza

Mi nombre es Pablo Carranza Fernández, paciente del Dr. Villanueva.

Sufrí un accidente muy grave que me dejó el pie derecho colapsado, con una grave artrosis subastragalina y el pie aplanado y deformado, casi en mecedora.

Mi cuadro era complejo, porque exigía una artrodesis de la articulación subastragalina y una osteotomía del calcáneo para intentar corregir el pie plano y mejorar la función y poder hacer esfuerzos, permanecer de pie muchas horas y hacer deporte. El doctor me hizo las dos operaciones a la vez, como una sola.

El trato del Dr. Villanueva y su equipo, desde el primer momento, fue más allá de la profesionalidad. Fue un trato cercano y brutalmente comprensivo, ante la complejidad de la situación en que me encontraba antes de la intervención, así como las posibles dificultades añadidas en la recuperación, debido a otras enfermedades asociadas que, en mi caso, podrían comprometer la unión satisfactoria de mi hueso.

Tras un proceso satisfactorio y un postoperatorio gestionado a la perfección (superando juntos contratiempos que, a largo plazo, han supuesto más bien una mejora en mi calidad de vida) me encuentro, gracias a la actuación del doctor, en una etapa absolutamente ilusionante en que no sólo he podido avanzar en mis estudios de cocina, sino plantearme la posibilidad de competir a medio-largo plazo en el deporte que es el híbrido perfecto de los sueños de mi vida: ajedrez y boxeo.

La experiencia, sin duda difícil y dolorosa en muchas fases, ha sido muy enriquecedora para ambos. Sinceramente agradecido por su ayuda y entrega.

Comentario del Doctor Villanueva al Testimonio de Artrodesis Subastragalina.

Gracias Pablo por tu confianza y por tu lucha, incluso en los peores momentos. Nunca te has rendido y tú siempre has tenido fe en que superaríamos juntos todas las adversidades.

Yo tenía ese miedo natural que siempre me acompaña en los pacientes muy complejos y con tantas incertidumbres, ese miedo que hace que los médicos seamos reacios a aceptar ciertos casos, por el riesgo a fallar. Afortunadamente, has mejorado mucho y me has enriquecido mucho, como paciente y como persona.