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Deformidad de Hallux Rigidus

La deformidad de hallux rigidus es una artropatía degenerativa (artrosis) del primer dedo caracterizado por la rigidez de la articulación metatarso-falángica (cabeza del primer metatarsiano y base de la primera falange).

A diferencia del hallux valgus, afecta más frecuentemente a los varones (entre los 40 y los 60 años) que a las mujeres.

Es una deformidad de la articulación metatarso-falángica del primer dedo del pie, la cual causa dolor, rigidez e incluso, en fases evolucionadas, gran limitación de la movilidad hacia la flexión dorsal, pudiendo terminar en una completa anquilosis, es decir, la pérdida total de la movilidad.

Las causas que pueden favorecer el desarrollo de esta enfermedad son los traumatismos, la gota o pseudogota, la osteocondrítis de la cabeza del primer metatarsiano o una artrosis o artropatía degenerativa de cualquier causa.  La lesión de hallux rigidus es frecuente entre algunos corredores pronadores con un primer metatarsiano más largo de lo habitual (pie egipcio), que provoca un despegue del ante pie por su borde interno que concluirá con la destrucción del cartílago articular y la consiguiente artrosis articular y rigidez.

Causas del Hallux Rigidus.

La alteración biomecánica más frecuente es que el primer radio se encuentre en flexión dorsal respecto al resto de los metatarsianos, esto va a originar que el movimiento de rodamiento y deslizamiento sea inadecuando produciendo pequeños traumatismos entre la falange proximal y la cabeza del metatarsiano.

Esta alteración o disfunción biomecánica se suele dar en personas con pie plano o hiperpronado, pero también se puede dar en traumatismos en el dedo gordo, artritis como la gota, en actividades profesionales que tiene que estar mucho tiempo de cuclillas…etc

¿Por qué se produce el Hallux Rigidus?.

La pérdida de movilidad en la articulación y el mal apoyo del primer dedo hacen que este no realice bien su trabajo. El dedo gordo no flexiona completamente, suele estar en extensión o flexión dorsal, por lo que no recibe el apoyo correctamente.

El síntoma predominante del hallux rigidus es el dolor durante la deambulación.

Al caminar por terrenos irregulares o con cuestas se somete a mayores exigencias al pie, y el dolor aumenta. Para defenderse del dolor los pacientes tienden a pisar con el exterior del pie, desgastando el zapato por fuera.

La articulación metatarso-falángica está engrosada, inflamada o deformada. La palpación es dolorosa o molesta y se pueden notar irregularidades y picos de artrosis en la articulación, a través de la piel o chasquidos articulares. Si intentamos flexionar el primer dedo se exacerba el dolor. La flexión dorsal también está limitada y es dolorosa.

especialista en traumatología Dr. Villanueva Lesiones del Pie Deformidad de Hallux Rigidus o Juanete
especialista en traumatología Dr. Villanueva Lesiones del Pie Deformidad de Hallux Rigidus o Juanete
especialista en traumatología Dr. Villanueva Lesiones del Pie Deformidad de Hallux Rigidus o Juanete

Hallux rigidus con osteofitos y pinzamiento o estrechamiento de la articulación metatarso-falángica.
El primer dedo está extendido y no se apoya bien sobre el suelo.

Lesiones del Pie Deformidad de Hallux Rigidus o Juanete

Diagnóstico del Hallux Rigidus.

El diagnóstico del hallux rigidus empieza con la sospecha clínica, en pacientes con el cuadro clínico descrito. Sin embargo es importante detectarlo lo antes posible. Antes de producirse el “hallux rigidus” aparecerá el “hallux limitus funcional” el cual se podrá abordar, evitando la evolución hacia el hallux rigidus.

Una manera fácil de intuir que existe un “hallux limitus funcional” son las hiperqueratosis, siendo la más llamativa el “pinch callus”, el que nos sugiere la biomecánica que está realizando el pie, lo habitual es que se produzca esta hiperqueratosis por una deambulación denominada “roll-off o twist-off”, en definitiva los dos tipos son una adaptación del pie a la alteración del primer radio en flexión dorsal.

Pero el especialista deberá de realizar una batería amplia de pruebas para diagnosticar el hallux rigidus. Con frecuencia existe una hiperextensión de la articulación interfalángica.

Las radiografías objetivan un pinzamiento articular (el espacio de la articulación metatarso-falángica está reducido), con esclerosis ósea y osteofitos.

Tratamiento de la Deformidad del Hallux Rigidus.

En las fases iniciales el tratamiento conservador de la deformidad del hallux rigidus incluirá la realización de ejercicios pasivos con tracción del dedo para aumentar la movilidad articular, las infiltraciones o la utilización de una plantilla correctora estabilizadora.

Un zapato con suela en balancín puede mejorar el cuadro clínico, facilitando el rodamiento del pie, durante la marcha, sin forzar la flexión dorsal ni hacer tanta fuerza, en la articulación metatarso-falángica, para el despegue.

En fases más evolucionadas se pueden combinar diferentes medidas:

– Ortesis plantar
– Aines
– Infiltracion con  plasma rico en plaquetas, ácido hialurónico o corticoides

Finalmente, si el cuadro clínico de hallux rigidus es muy invalidante, se puede recurrir a la cirugía.
Las técnicas son muy variadas, desde la artroplastia de la articulación (se coloca una miniprótesis al igual que en la cadera o la rodilla) o las osteotomías mediante cirugía percutánea mínimamente invasiva (MIS) que pueden hacerse sobre la falange o primer meta o sobre las dos: doble osteotomía (sobre la falange y el metatarsiano), para conseguir una neoarticulación en suspensión, más flexible y con menos complicaciones que las anteriores.

La artrodesis o fusión también elimina el dolor, aunque es difícil conseguir una posición ideal que se adapte a las necesidades de cada paciente en sus diversas actividades o, en el caso de las mujeres, para cambiar la altura de su tacón o simplemente cambiar de zapatos.

especialista en traumatología Dr. Villanueva Lesiones del Pie Deformidad de Hallux Rigidus o Juanete
Lesiones del Pie Deformidad de Hallux Rigidus o Juanete

Infiltración en hallux-rigidus.